Descarga más segura de fluidos químicos

El transporte de combustible, petróleo crudo, productos químicos, material radioactivo o contaminado y gases comprimidos entraña riesgos, no sólo para el proceso de descarga o carga, sino también para el empleado ejecutivo y el medio ambiente. Es importante que el fluido se descargue y almacene de forma segura y sin fugas. Siempre que sea posible, los fluidos nocivos se producen o procesan localmente para minimizar el riesgo de liberar una sustancia peligrosa al medio ambiente o de exponer a un empleado al riesgo de contacto directo. Es cierto que existen normativas casi universalmente estrictas en cuanto a la producción de sustancias químicas peligrosas.

Sellado hermético significa seguridad

Tan pronto como el líquido se transporta por carretera o por mar, debe descargarse en tanques de almacenamiento para su conservación o distribución. Cuando se descarga en la estación de bombeo, ciertas cuestiones son muy importantes.

Además de la calidad de la manguera y de las conexiones entre el recipiente de almacenamiento y el tanque, la bomba es un elemento esencial para el transporte seguro del líquido. La bomba debe vaciar rápida y eficazmente el contenido de la cisterna sin riesgo de fugas. El sistema debe ser una solución a la vez fiable y que requiera un mantenimiento mínimo.

Líquidos:

Existen muchos tipos de líquidos agresivos: 

Sin cierres mecánicos: sin fugas

Una bomba centrífuga accionada por imán ofrece el mejor nivel de protección contra fugas. El diseño en sí no tiene fugas: la bomba tiene imanes permanentes con el líquido asegurado en la cámara de bombeo. El concepto de accionamiento magnético no requiere juntas mecánicas sujetas a desgaste por abrasión entre el líquido, el mecanismo de accionamiento y el entorno.

El líquido está completamente separado del motor, únicamente conectado por la fuerza magnética de un imán exterior (lado del motor) y el imán interior (lado del líquido) que, a su vez, acciona el impulsor centrífugo.

Una bomba de accionamiento magnético es, por tanto, una bomba mucho más segura, ya que no hay posibilidad de que el líquido se derrame. En condiciones normales de funcionamiento, la bomba puede funcionar durante años y años, antes incluso de que sea necesario sustituir el conjunto de cojinetes. En muchos casos, las bombas centrífugas de accionamiento magnético se devuelven para su reacondicionamiento después de 15 ó 20 años+.